Aunque no de la misma magnitud, son recurrentes en Tijuana incidentes como el registrado en el fraccionamiento Lomas de Agua Caliente, el 22 de septiembre de 2014, por la fractura de un ducto subterráneo de gas que inició un incendio, el cual se prolongó por cuatro horas. “Normalmente no existe fuego, pero es de manera frecuente”, comenta José María Rivas, presidente de la división noroeste de Zeta Gas, respecto a las fugas de gas provocadas por el rompimiento de los ductos. En promedio, se registra uno de estos casos al mes. La razón es la falta de coordinación entre el Ayuntamiento, instituciones públicas y empresas que prestan servicios de forma subterránea. Tal es el caso del incendio registrado en Lomas de Agua Caliente. Una cuadrilla de trabajadores de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), excavaba en la calle Club Britania para reparar una fuga de agua que les había sido reportada. Sin embargo, el chofer de la retroexcavadora perforó un ducto domiciliario de la empresa Zeta Gas, el cual originó el fuego. Las llamas salidas de la tubería, tardaron más de cuatro horas en extinguirse. Según lo informado en el lugar por el departamento de Bomberos, el fuego no podía ser controlado porque la empresa de gas no identificaba las válvulas que interrumpen la circulación del combustible. Alfonso Álvarez Juan, explicó que la paraestatal se encargará de solventar el gasto por la reparación de los daños ocasionados, haciendo uso de los seguros con los que cuentan. Sobre el empleado que erró en sus funciones, explicó que se encuentra dentro de un proceso de investigación en el departamento de Contraloría, mismo que determinará sus responsabilidades. Por su parte, el presidente de la división noroeste de Zeta Gas, dijo que la circulación del combustible tardó en detenerse debido a la distribución de la tubería que no permite controlarlo directamente, pues los ductos están distribuidos mediante una red. Así que fue necesario colocar una especie de pinzas en cuatro tubos que derivan del ducto roto, “… presionan nuestras líneas, pero ahí se tuvieron que poner cuatro, porque le llegaba gas por cuatro partes, eso nos llevó cuatro horas”. Cuando se le preguntó sobre el riesgo que esto pudiera implicar, aseguró que la distribución de sus 200 kilómetros de tubería a lo largo de la ciudad está apegada a la Norma Oficial Mexicana 003-SECRE-2011. A pesar de que no existieron daños humanos, hay pérdidas materiales que resarcir, situación que debería ocupar a autoridades y empresas privadas con relación a la administración en servicios subterráneos. En lo anterior han coincidido tanto Álvarez Juan como González Rivera, quienes tendrían la próxima semana una reunión para mejorar la coordinación entre las dos instancias durante la realización de obras subterráneas. El presidente de Zeta Gas, enfatizó la necesidad de generar nuevos sistemas de coordinación para administrar los servicios subterráneos. Como ejemplo, comentó que en Estados Unidos, una empresa es la encargada de esas tareas y también es la responsable de tener los planos para indicar cómo, cuándo y dónde abrir zanjas. Mientras tanto, la dirección de Bomberos en Tijuana entregó un informe solicitado por la presidencia municipal de Tijuana, encabezada por Jorge Astiazarán, en el cual recomiendan que todas las instituciones que realicen trabajos en el subsuelo, deban dar aviso a esta dependencia. Según informó Carlos Gopar, director de bomberos, no se elaboró un peritaje, pues esto depende de que los ciudadanos afectados lo soliciten a través de una denuncia en el ministerio público.
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