El 5 de febrero de 2014, el Cabildo de Ensenada revocó dos polémicos reglamentos aprobados al cierre de la administración de Enrique Pelayo Torres, y con ello se suspende la posibilidad de emitir licencias para uso habitacional en el Valle de Guadalupe, así como para la instalación de gasolineras. Por unanimidad, regidores, síndicos y alcalde, dieron marcha atrás tanto al Reglamento de Zonificación y Uso de Suelo para el Programa Sectorial de Desarrollo Urbano-Turístico de los Valles Vitivinícolas como a los cambios hechos al Reglamento y Usos del Suelo para la Instalación, Construcción y Operación de Estaciones de Carburación y de Servicios de Productos derivados del Petróleo. Ambos reglamentos serán revisados nuevamente por los regidores, en lo que esperan sea un proceso más abierto y democrático, contrario a lo ocurrido a finales del 2013, cuando el Cabildo del XX Ayuntamiento ignoró los reclamos de cientos de personas y de grupos organizados de Ensenada, quienes denunciaron uno de los procesos menos transparentes en la ciudad. No obstante, la revocación en el caso de las gasolineras, al no ser retroactiva, no afectará a las ya instaladas. Sobre el reglamento que modificó las densidades urbanas en la llamada “Ruta del Vino”, el alcalde Gilberto Hirata aseguró que el tema se estudiará en comisión. “Este Cabildo está tomando esta decisión para que se hagan mesas de trabajo con vitivinicultores, agricultores, ejidatarios y todos los implicados en esta importante vocación del Valle”. Durante la misma sesión de Cabildo, se aprobó por unanimidad una propuesta del alcalde para eliminar de la estructura del gobierno municipal cuatro secretarías, las cuales representaban un gasto anual administrativo estimado en 10 millones de pesos. Así, se convertirán en direcciones las que fueran las Secretarías de Administración, Tesorería, Seguridad Pública, e Infraestructura. Ricardo Meza
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